Fibromialgia y fatiga crónica durante la crisis coronavirus

Fibromialgia y fatiga crónica durante la crisis coronavirus

Aunque por el momento no existen evidencias científicas de que la infección por Coronavirus conlleve una prolongación del dolor o mayores dificultades para la recuperación, no dejan de ser enfermedades crónicas y, en consecuencia, la respuesta del paciente con estas patologías puede ser muy diferente a la de una persona sana.

Aparte de las recomendaciones y obligaciones impuestas durante las diferentes fases del proceso de desescalada, es importante que quienes padecen fibromialgia o fatiga crónica afronten esta nueva etapa con rutinas de ejercicio y descanso adaptadas a sus necesidades específicas.

  • Practicar ejercicio físico de forma regular: el ejercicio aeróbico o cardiovascular, siempre dentro de las limitaciones de cada paciente, favorecen al aumento de la capacidad funcional de músculos y tendones y reducen el dolor y la fatiga.

 

  • Evitar las posturas prolongadas: cualquier posición que se mantenga durante más de 20 minutos puede ser desencadenante del dolor. Conviene hacer pausas cada cierto tiempo para estirar, moverse y desentumecer músculos y articulaciones, algo que suele pasar por alto sobre todo cuando se realiza teletrabajo.

 

  • Establecer horarios: la jornada no puede convertirse en una sucesión de tareas sin descanso. Se deben establecer tiempos de actividad física, de trabajo intelectual y de descanso.

 

  • Prepararse para la hora de dormir: el ejercicio ayudará a conciliar el sueño, pero no debe practicarse durante las dos horas previas a la hora de dormir. En esta misma línea, no conviene la ingesta de alimentos sin un paréntesis de al menos dos horas antes de meterse en la cama.

 

  • Asumir un papel activo: la fibromialgia y fatiga crónica no son enfermedades que se aborden desde la pasividad. El manejo del dolor parte de la predisposición del paciente y del conocimiento de su condición. La pandemia no puede convertirse en una excusa para bajar la guardia y dejarse llevar por una actitud derrotista.

Ni el dolor que provocan la fibromialgia y fatiga crónica ni el temor al contagio por Covid-19 deben condicionar la vida de quienes padecen estas patologías. Tanto los enfermos como su entorno inmediato (amigos, familiares y cuidadores) deben hacer un esfuerzo por mantener una actitud positiva en estas circunstancias para evitar que los síntomas de estas enfermedades conlleven una disminución en la calidad de vida de los pacientes.

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El Covid-19 también puede afectar a los pacientes
con Fibromialgia y Sindrome de Fatiga Crónica (SFC) por SEFIFAC ( Sociedad Española de Fibromialgia y Sindrome de Fatiga Crónica)

Link: https://www.semg.es/images/2020/Coronavirus/fibromialgia_covid19.pdf

Vía SEFIFAC y Cuidum (Mª Victoria López.