10 Jun La ozonoterapia ayuda a mejorar la función muscular en niños con parálisis cerebral
La ozonoterapia ayuda a pacientes con parálisis cerebral.
Un estudio en 45 pacientes desvela que el 70% de los niños tuvieron una mejoría pronunciada en el tono y función muscular, según sus familiares.
La Parálisis Cerebral Infantil (PCI) es la discapacidad motora más frecuente en la niñez.
Se estima que entre un 2 y un 2,5 por cada mil nacidos en España tiene parálisis cerebral, es decir, una de cada 500 personas.
Además de presentar diversos trastornos motores y posturales que causan limitación en la actividad, atribuidos a trastornos no progresivos ocurridos en el cerebro en desarrollo durante la etapa fetal o en los primeros años de vida (1-2 años), estos pacientes sufren de otras alteraciones como convulsiones, lentitud psicomotriz y del lenguaje, trastornos del aprendizaje, de la atención y de la conducta en diferentes grados.
Aunque la parálisis cerebral no tiene cura, es crucial abordar sus síntomas para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.
Los tratamientos tradicionales como la fisioterapia y la logopedia han sido fundamentales en este aspecto.
Sin embargo, para aquellos niños con múltiples discapacidades, incluida la parálisis cerebral, el panorama se torna más complejo.
Una problemática que además de afectar al niño, impacta directamente en toda la dinámica familiar.
La búsqueda de soluciones efectivas se convierte en una prioridad, y es aquí donde la ozonoterapia emerge como una esperanza.
En Clinalgia, por ejemplo, tratamos a algunos pacientes con parálisis cerebral desde hace años, combinando técnicas de ozonoterapia con tratamientos de fisioterapia con resultados muy satisfactorios.
Eficicacia de la Ozonoterapia en el tratamiento de la Parálisis Cerebral Infantil
Además de nuestra experiencia, desde Clinalgia queremos destacar el ensayo clínico llevado a cabo por el Centro de Investigaciones del Ozono (CIO) de La Habana (Cuba), cuyo objetivo fue determinar la utilidad de la ozonoterapia en el tratamiento de la Parálisis Cerebral Infantil (PCI).
Descarga aquí el estudio completo
Para ello se estudió el impacto de la ozonoterapia en cuarenta y cinco pacientes, desde recién nacidos hasta los ocho años, diagnosticados con parálisis cerebral de causa hipóxico-isquémica.
Una lesión cerebral que resulta de la privación de oxígeno en el cerebro del bebé y que puede provocar, entre otros síntomas, convulsiones, dificultad para alimentarse, tono muscular reducido, flacidez, disfunción orgánica y complicaciones respiratorias.
La metodología del estudio incluyó la aplicación de criterios de evaluación antes y después del tratamiento, utilizando escalas reconocidas como el Sistema de Clasificación de la Función Motora Gruesa (GMFCS) y la escala modificada de Ashworth para evaluar el tono muscular, entre otras.
En cuanto a la forma de administración fue a través de insuflación rectal. Se trata de una técnica sistémica altamente eficaz y segura, especialmente en pacientes pediátricos.
Al penetrar el ozono en la mucosa muscular, tiene la capacidad de ingresar a la circulación de los capilares venosos y linfáticos de forma muy rápida, sin representar ningún riesgo para el niño.
Los resultados demostraron una mejora significativa, especialmente en pacientes menores de cuatro años, donde se observó una mayor respuesta al tratamiento.
Resultados: Mejor motricidad y tono muscular
Los datos revelaron que el 65% de los casos mostraron mejoras en la evolución del trastorno motor, mientras que el 70% de los niños experimentaron una marcada mejoría en el tono y la función muscular, según lo reportado por sus familiares.
Además, es importante destacar que no se registraron efectos secundarios durante el estudio, lo que resalta la seguridad de la aplicación del ozono médico.
De nuevo, estos hallazgos subrayan el potencial de la ozonoterapia como una opción complementaria en el tratamiento de la parálisis cerebral infantil.
Es alentador ver cómo nuevas modalidades terapéuticas, como el uso del ozono médico, pueden mejorar la calidad de vida de quienes padecen este tipo de trastornos.
La ozonoterapia surge una vez más como una “luz de esperanza” para las familias que tienen este problema, ofreciendo la posibilidad de una vida más plena y autónoma para sus seres queridos.