¿Puede la ozonoterapia mejorar las enfermedades cardiovasculares?

¿Puede la ozonoterapia mejorar las enfermedades cardiovasculares?

Cada vez vivimos más… pero también con más enfermedades cardiovasculares: insuficiencia cardíaca, isquemia cerebral, degeneración macular… 

Todas ellas tienen algo en común: inflamación crónica, mala oxigenación de los tejidos y un “estrés oxidativo” que nuestras células no consiguen frenar.

Las enfermedades cardiovasculares como la isquemia crónica de las extremidades (CLI), la insuficiencia cardíaca crónica (ICC), la isquemia cerebral o incluso la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), son hoy algunas de las principales causas de discapacidad y mortalidad en el mundo. Estas patologías comparten tres factores clave:

·       Isquemia (falta de oxígeno en los tejidos)

·       Inflamación crónica

·       Estrés oxidativo persistente

¿Qué enfermedades cardiovaculares degenerativas pueden tratarse con ozonoterapia?

1. Isquemia Crónica de Miembros Inferiores (CLI)

  • Provocada por una obstrucción severa de las arterias.
  • Genera dolor, úlceras y riesgo de amputación.
  • La ozonoterapia mejora la oxigenación y reduce la inflamación local.
 

2. Insuficiencia Cardíaca Crónica (ICC)

  • Incapacidad del corazón para bombear sangre de forma eficiente.
  • Provoca fatiga, disnea (sensación de falta de aire o dificultad para respirar) y retención de líquidos.
  • El estrés oxidativo agrava la progresión de esta enfermedad.
 

3. Enfermedad Arterial Coronaria (EAC)

  • Causa principal de infartos de miocardio.
  • Asociada al estrechamiento progresivo de las arterias coronarias por placas de ateroma.
  • La inflamación vascular juega un papel clave en su desarrollo.
 

4. Isquemia Cerebral / Accidente Cerebrovascular Isquémico (ICTUS)

  • Pérdida del flujo sanguíneo al cerebro.
  • Consecuencias neurológicas graves y muchas veces irreversibles.
  • La neuroinflamación post-isquemia podría ser un blanco de terapias antioxidantes.
 

5. Aterosclerosis Sistémica

  • Endurecimiento y pérdida de elasticidad de las arterias por acumulación de grasa y calcio.
  • Base de múltiples enfermedades cardiovasculares (infartos, isquemias, etc.).
 

6. Hipertensión Arterial Crónica

  • Daño constante en vasos sanguíneos, especialmente en riñones, retina y corazón.
  • Produce microlesiones que generan un ciclo de inflamación y estrés oxidativo.
 

7. Degeneración Macular Relacionada con la Edad (DMRE)

  • Enfermedad ocular progresiva que puede llevar a la ceguera.
  • Asociada con microisquemias y degeneración del epitelio pigmentario de la retina.
  • La retina consume gran cantidad de oxígeno, y el ozono podría apoyar la oxigenación.
 

8. Cardiopatía diabética

  • Complicación de la diabetes mellitus tipo 2.
  • Aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca e infarto.
  • Está mediada por inflamación crónica, disfunción endotelial y daño oxidativo.
 

9. Enfermedad renal crónica de origen vascular

  • La microangiopatía provoca daño en los glomérulos renales.
  • Aumenta el riesgo cardiovascular global del paciente.
 

10. Síndrome Metabólico

  • Conjunto de condiciones como obesidad abdominal, hipertensión, resistencia a la insulina y dislipemia.
  • Multiplica el riesgo de infarto e ictus.
  • La ozonoterapia podría intervenir en la regulación del metabolismo oxidativo.

En este contexto, desde Clinalgia destacamos el estudio de los investigadores Bocci, Travagli y Zanardi, titulado «May Oxygen-Ozone Therapy Improve Cardiovascular Disorders”, donde se plantea el uso de la la autohemoterapia con ozono, una técnica donde se ozoniza una muestra de sangre del propio paciente y se reinyecta, con el objetivo de modularla respuesta biológica ante estas condiciones crónicas.

¿Por qué tratar estas patologías con autohemoterapia?

La autohemoterapia ozonizada, destacada en el estudio anteriormente citado, se presenta como la forma más segura y eficaz de aplicar ozonoterapia en enfermedades cardiovasculares complejas como las descritas en este artículo.

Este método, que consiste en ozonizar una pequeña cantidad de sangre del paciente y reinyectarla, permite frenar el estrés oxidativo crónico, mejorar la oxigenación de los tejidos, reducir la inflamación sistémica y equilibrar la respuesta inmunitaria.

Gracias a su efecto sistémico (el tratamiento actúa en todo el cuerpo), controlado y documentado clínicamente, se presenta como una terapia complementaria frente a trastornos degenerativos en una población cada vez más envejecida y con alta incidencia de enfermedades vasculares.

El objetivo no es sustituir los tratamientos médicos habituales (como antihipertensivos, anticoagulantes o estatinas), sino sumar una técnica complementaria que ayude a restaurar el equilibrio redox del cuerpo, es decir, a controlar el exceso de radicales libres que daña nuestras células de forma progresiva.

¿Cómo ayuda el ozono médico a nuestro organismo?

  • Aumentando la oxigenación de los tejidos afectados.
  • Estimulando las enzimas antioxidantes naturales del organismo.
  • Regulando la respuesta inflamatoria excesiva, tan común en la aterosclerosis, la diabetes o las enfermedades neurovasculares.
 

Por ejemplo, en el caso de la degeneración macular asociada a la edad, los autores explican cómo una mejor oxigenación de la retina, uno de los tejidos con mayor consumo de oxígeno del cuerpo, podría retrasar la degeneración del epitelio pigmentario y la muerte de los fotorreceptores, es decir, preservar la visión central y ralentizar el avance de la ceguera progresiva en personas mayores.

Aunque existen numerosas investigaciones al respecto, aún no hay estudios clínicos a gran escala que confirmen su eficacia definitiva, y los propios autores subrayan la necesidad de más investigación rigurosa.

En cualquier caso, cabe destacar que la ozonoterapia ya está abriendo una nueva vía de tratamientos complementarios frente a enfermedades cardiovasculares complejas y degenerativas como las descritas anteriormente. Pero debe aplicarse con precaución, con seguimiento médico y siempre dentro de un marco de medicina basada en evidencia.